martes, 28 de diciembre de 2021

El alma me hizo Big Bang

       Hoy el mundo se despertó cansado, podrido de la sensación de frustración que venía cargando en cada parte de sus cinco continentes desde hacía meses. Empezó a girar sobre su propio eje, acorralado por la sensación de ahogo que le provocan las decisiones no tomadas o las incertidumbres como respuesta a las preguntas de su pana, el Universo. 

Hoy el mundo no aguantó más las pesadas nubes de su cielo y una supernova liberó el llanto contenido, dejó atrás el victimismo, la comodidad y la falta de confianza en sí mismo y aún sin poder contener los grandes ríos, salió de su órbita y se arriesgo a vivir como nunca antes había podido. 


Ya trepado en un asteroide, decidió recorrer galaxias y constelaciones, cambió los “no sé” por un gran “Sí a todo”, los pensamientos por acciones y las sensaciones de agobio por una gran sonrisa ante cualquier situación. Respiró profundo llenando su cuerpo de polvo cósmico y cruzó nebulosas sin prejuicios; dejó a su ego atado a una estrella  y  comprendió que la materia oscura que intentaba ocultar tras siete maravillas, eran parte de los componentes minerales, necesarios para ser el imponente albergue de tantos tesoros.

 

Hoy el mundo abrazó sus miedos, acarició sus inseguridades y liberó toda la frustración en forma de lluvia, calma pero constante, con la que limpió su alma y la llenó de sueños cumplidos, este día el cielo mutó de un gris oscuro a cometas de colores. 



 Hoy el mundo se regaló la posibilidad de vivir despojándose de su antiguo ser; 

hoy el mundo me regaló sus colores para que pinte mis días grises. 


lunes, 20 de diciembre de 2021

Sin vos

    Y de repente, una noche de verano, ya no trepabas como telaraña

por mis pies desnudos

dejando huellas entre los bellos de mis piernas, como hormigas que marcan 

el caminito al nido.  


Y de repente una noche dejé de soñarte mía,

 

te quite el poder de alborotar mis sentidos y como puta magia

 

tu voz ya no resonaba a coro en mis retinas,

 

ya no invadías mi cuerpo con tu perfume a margaritas y lilas. 


Y de repente, aquella noche me descubrí excitada sin vos


entonces volví a ser dueña de la cuerpa que alguna vez te amó.

 

Y ahí estaba voluptuosa. Para mi


                    mojada…  

                                          erizada...

                                                             extasiada…


con mis dedos impregnados de translúcido néctar, libres de cada una de tus esquirlas.   


Y de repente, no hubo otra noche, ni otro instante en el que te sintiera


de golpe en mis oídos, susurrando encantadas melodías

  

y ya mis labios no balbuceaban, tu nombre, maldito.


Y de repente, 

una noche 

estaba 

desaprendiendome 

de 

vos.


jueves, 16 de diciembre de 2021

Frenesí

  


A veces me sorprende como los recuerdos pueden presentarse en el momento menos esperado, influenciados claro, por algún acontecimiento externo que estamos viviendo, del que no somos realmente conscientes, hasta que un enorme déjá vu nos invade.

Ese día uno de éstos llegó a mi. Estaba yo comodamente recostada en los brazos de una mujer con un gran don: ella podía, verdaderamente y sin exagerar, enamorar a cualquier ser vivo de este planeta de la forma que quisiera y siendo sencillamente ella. Y si, ahí estaba yo claro, entregada a los maravillosos acordes que ambientaban la escena.  

-Cierra los ojos, me dijo. Sentí… ¿A dónde te lleva esta música?

y misteriosamente desperté en el lugar menos pensado, en aquel río de aquel pueblo en el que me había sentido más que en ningún otro lugar. Ahí me vi, rodeada de árboles, colmada de una cálida luz blanca que atravesaba mis dedos elevados al cielo y envuelta en la brisa otoñal que sutilmente acariciaba mis pestañas. 

-y con quién estás? Siguió indagando.

-Sola. -respondí. Estaba rea
lmente sola a orillas del río, bailando sintonía con la naturaleza. Estoy sola -seguí- pero se siente realmente bien. Me gusta esta soledad.

-y a qué huele la paz?. Preguntó sin vacilar, como sabiendo con exactitud lo que yo estaba sintiendo. 

-a tierra mojada- contesté. Al verde y babeante musgo aferrado a las piedras con una obsesión tan grande, como si su vida dependiera de una fuerza que nos apega a lo conocido. 

En esa paz pude oír el exacto momento en el que la libertad, despojada de miedos, junto con  la certeza de hacer lo correcto se me incrustaban en las venas, no habiendo nada ni nadie, que pudiera detener ese torrente de pasión que me pateo las tripas y me hizo arder el corazón. Porque en ese instante, en ese exacto momento de adrenalina y euforia, ya no hubo vuelta atrás, y con el alma en las manos comprendí que había dejado de ser oruga para vivir en la piel de la mujer que siempre soñé con ser.


miércoles, 8 de diciembre de 2021

Los casi besos

 El clásico nudo en el estómago 

[ transformado en mariposa por un poeta enamorado] 

y la respiración entrecortada, se sincronizaron sistemáticamente, en el instante en que 

ambas pupilas destellaron aprobación. 

de inmediato mi hábil mano derecha la tomó por el cuello con sutil firmeza,

la boca,

previamente humedecida con mi lengua, 

se estrelló sin paracaídas en la comisura dulce donde se quiebran las sonrisas.

Sin lugar a dudas es 

casi beso 

intencionado, se convirtió en el acto de entrega más honesto que alguna vez 

escapó de mi ser.